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¿Buscas alternativas?

Para una versión más ligera, usa Philadelphia Light¿Con ganas de experimentar?

¿Sabías qué?

Cuando termines de preparar tus comidas, no tienes por qué tirar la tarrina. Hay muchas formas de reutilizarla.

¿Cómo prepararlo?

1
En una bandeja de horno colocar 8 moldes sin base, de 7 cm de diámetro. Mezclar los bizcochitos triturados con la mitad del café y la mantequilla derretida, dividir la masa por los moldes, presionando bien e introducir en la nevera.
2
Sumergir las hojas de gelatina en una taza con agua fría. Mientras tanto, calentar el café restante hasta que esté templado. Añadir la gelatina diluida y bien exprimida y mezclar hasta que se deshaga por completo.
3
Batir el queso Philadelphia con el azúcar hasta obtener una masa cremosa. Añadir el café con la gelatina diluida y finalmente incorporar la nata montada. Separar 2/3 de la mezcla en una taza y añadir el chocolate fundido.

PRO TIP Manteniendo una dieta equilibrada se puede consumir, de forma ocasional, una porción de este postre.

PRO TIP Si no se dispone de granos de café de chocolate, se pueden sustituir por pepitas o virutas de chocolate.

4
Retirar los moldes de la nevera y distribuir la mezcla de chocolate sobre la base de bizcocho. Por encima, colocar la otra mezcla. Alisar bien e introducir en la nevera durante 3 horas o hasta que esté solidificado.
5
Antes de servir, retirar los cheesecakes de los moldes, calentándolas con un trapo mojado y templado, empujando suavemente desde la base. Espolvorear cacao en polvo y granos de café de chocolate.